Un Capricho de sus padres lo había obligado a llevar el nombre bíblico de una especie de autista que aseguró que el mundo entero naufragaría bajo las aguas de una tormenta sin precedentes. Con ese nombre firmó, por allá de los años 90s, esta serie titulada Alegs y Monaliza, que versa sobre los avatares de una pareja enmarañada en esa extraña forma de relación que algunos hombres llaman amor.
Un Pez